lunes, 7 de diciembre de 2009

Decir la verdad, exigen electricistas a Televisa luego de más de 10 horas de protestas en el DF



POR:Fabiola Martínez y Patricia Muñoz
FOTO: Marco Peláez

PUBLICADO EN: Periódico La Jornada
Sábado 5 de diciembre de 2009, p. 5

Al término de “la toma simbólica del Distrito Federal”, miles de integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) marcharon anoche del Monumento a la Revolución a Televisa para exigir a la empresa que "difunda las verdaderas razones" del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LFC).

Martín Esparza, dirigente del SME, pidió a la televisora derecho de réplica (aunque sea en espacios pagados por el gremio, dijo) y cese de la "campaña amarillista, de hostigamiento, linchamiento y escarnio" contra los electricistas, al señalarlos como responsables del déficit en LFC.

"Nosotros no pedimos esos mil 500 pesos que dice el espot, que hace daño moral a nuestras familias", expresó en referencia a los mensajes del gobierno federal difundidos en radio y televisión para justificar el cierre del organismo.

Desde temprana hora, miles de electricistas e integrantes de organizaciones sociales, sindicales, campesinas y políticas afines marcharon al Monumento a la Revolución, procedentes de diversos puntos que unen a la capital del país con las entidades vecinas.

También realizaron mítines en media docena de dependencias federales, algunos de éstos breves y otros concurridos y prolongados, con algunos cortes intermitentes a la circulación vehicular.

Después de 55 días del cierre de LFC, por decreto presidencial, varias movilizaciones se convirtieron en un reto de resistencia física. Por ejemplo, los que se concentraron en el Metro Taxqueña demoraron más de cuatro horas en llegar –a pie– a su destino final, en las inmediaciones del Monumento a la Revolución.

Esta vez, los manifestantes no protestaron en casetas de cobro; sin embargo, en esos puntos fueron apostados cientos de policías con equipos antimotines y se realizó un operativo con sobrevuelo de helicópteros

No se registraron incidentes violentos –como ocurrió en la anterior jornada de protesta, cuando fueron golpeados y encarcelados 11 trabajadores–, aunque elementos de la Policía Federal retuvieron por más de hora y media una decena de autobuses en los que se trasladaban simpatizantes del SME de la "Caravana Sur Emiliano Zapata", procedentes de Morelos y Guerrero.

La movilización fue pacífica, "sin novedad", como avaló en su reporte la PF, tras el ingreso al Distrito Federal de decenas de vehículos y miles de personas que avanzaron por las principales arterias. Cerca de las ocho de la noche, los más de 3 mil agentes federales desplegados regresaron a su centro de mando, en Iztapalapa.

La sorpresa

Después de más de 10 horas de movilizaciones y mítines, el líder del SME anunció ante los miles de electricistas que atiborraron la Plaza de la República que al término de su mensaje todos se trasladarían a las instalaciones de Televisa, ubicadas en avenida Chapultepec. El amplio contingente avanzó en una rápida y peculiar marcha nocturna; cruzó Paseo de la Reforma para tomar un tramo de Juárez y siguió por Balderas.

Apenas llegaron los electricistas a Televisa, Esparza ingresó a las instalaciones de la empresa, donde conversó –vía telefónica– con un directivo, quien envió a un reportero para que ofreciera cámara y micrófono al dirigente. El ejecutivo se comprometió a que el material será transmitido en los noticieros del lunes, porque ayer sólo dedicaron sus espacios al Teletón. Esparza advirtió que si la entrevista concedida en la entrada principal de Televisa Chapultepec no es difundida en los términos prometidos, regresará ahí, con sus compañeros, a hacer las manifestaciones pacíficas que sean necesarias.

Los trabajadores –dijo– no son los que administran LFC. Además, “tenemos un amparo; la empresa existe, nuestro contrato está vigente y habrá una audiencia constitucional el 10 de diciembre.

"Estamos manifestándonos aquí, como un derecho constitucional, para que todo el pueblo de México se entere de que el decreto tiene origen en la presión que ha ejercido la iniciativa privada sobre el (Poder) Ejecutivo", expresó.

[Balance de la toma simbólica del DF el viernes pasado] Incansables y festivos, no muestran desgaste al acompañar a su dirigente

POR:Rosa Elvira Vargas

PUBLICADO EN:Periódico La Jornada
Sábado 5 de diciembre de 2009, p. 5

Los electricistas no se cansan. Para resistir, marchar, gritar y dar sorpresas, son inagotables.

Y ayer, tras haber caminado desde los puntos de entrada a la ciudad más alejados y permanecer de pie, atentos, combativos y hasta alborozados durante ocho horas en el Monumento a la Revolución, los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) acataron prestos la consigna de su líder, Martín Esparza, de marchar a Televisa-Chapultepec.

Enjundiosos y a paso veloz se desplazaron sin mostrar el menor desgaste físico. En un santiamén llegaron más de 10 mil a las oficinas de la televisora y continuaron su retahíla de consignas y exigencias.

Caminar hasta las instalaciones de la avenida Chapultepec fue para ellos, y no se diga para la policía capitalina y los automovilistas, una gran sorpresa; ésa que desde temprano tenían reservada los líderes gremiales y que Esparza fundamentó en el "daño moral" que representa para ellos el archirrepetido espot (en radio y televisión) donde una voz masculina se presenta en un domicilio y, haciéndose pasar por enviado de Luz y Fuerza, exige a una mujer un pago de mil 500 pesos.

Es una "campaña criminal que ofende a los trabajadores", había dicho el líder en entrevista banquetera a un lado del campamento donde 10 mujeres electricistas sumaron ayer 12 días en huelga de hambre. Ellas, comentó también, ya presentan presión baja y evidente disminución de peso. "Pero el único responsable de su salud es Felipe Calderón Hinojosa."

Ausentes esta vez los diputados y otros personajes de la política en la llamada “toma simbólica” de la ciudad, Esparza Flores caminó rodeado por sus compañeros desde el cruce de Reforme e Insurgentes hasta el Monumento a la Revolución. Y en ese recorrido, el líder sindical desconocido por las autoridades laborales, y que ayer fue ratificado por el voto a mano alzada de sus seguidores, se veía a sus anchas.

Tanto, que cuando el contingente pasó frente al edificio marcado con el número 93 de Paseo de la Reforma –resguardado por 65 policías federales, porque ahí tiene oficinas el secretario del Trabajo, Javier Lozano– se sumó divertido y repitió varias veces–con su seña correspondiente– aquello de: "preparen, apunten... güevos".

Los electricistas y las organizaciones solidarias desbordaron la Plaza de la República, como sin duda lo hubieran hecho en el Zócalo capitalino. Desde el mediodía la multitud derribó una endeble valla metálica que dividía en dos la gran explanada. Los contingentes, sobre todo el que llegó por la calzada Zaragoza, porque ahí venían miles de maestros de la sección 22 de Oaxaca, ocuparon la calle del mismo nombre hasta Reforma, justo donde se encuentran las oficinas del ISSSTE.

La reproducción de botargas y otros monigotes con la imagen del presidente Felipe Calderón y de Lozano Alarcón, el ingenio en las frases plasmadas en carteles y mantas, así como las parodias de canciones, como las viejas Bule bule y La Bamba (rebautizada como La Chamba) o Yo no soy esa mujer, a cargo de Édgar y Priscila, de Riesgo Eléctrico, hablan también del inagotable ingenio electricista.

Los del SME siguen organizados y acatando en todo momento la estructura tanto sindical como de adscripción laboral. De acuerdo con ellas cumplen sus movilizaciones y al rencontrarse con sus compañeros de siempre es evidente la emoción que los embarga.

Y se cuentan sus cosas, la manera en que sobreviven y mantienen la determinación de no cobrar el finiquito. Que si unos venden tacos, ropa, gorditas, jugos y hasta gel y aceite para coches por el rumbo de la clínica 32 del IMSS; que si otros, junto al deportivo Xochimilco, venden jitomates, y alguien más, piñatas por la avenida del IMÁN.

–¿Antes habían vendido algo? ¿Conocían del negocio de los tacos?

"¡No, para nada! Yo estaba en el área de consumidores-contratos y mi esposa en tabuladores. Desde hacía más de 20 años trabajábamos en Luz y Fuerza, pero tenemos que hacer algo. Seguimos en esto. Decidimos no liquidarnos."

En el fondo, los 40 oradores de esa auténtica jornada de resistencia son aclamados por su actitud solidaria y cosechan los mayores aplausos cuando llaman a iniciar la huelga nacional.

"¡A güevo"!, lanza entonces el hombresote, como hace en cada concentración o asamblea sindical, y siempre en primera fila.